Debemos aprovechar las frutas de temporada para hacer mermeladas caseras que podamos consumir durante todo el año. Hoy la vamos a hacer de ciruelas rojas. Es mucho más fácil de lo que podéis imaginar.
INGREDIENTES 2 BOTES DE MERMELADA DE 400 G:
- 12 ciruelas ( unos 900 g )
- 450 g de azúcar ( la mitad de peso que de ciruelas )
- 1 rama de canela
- 8 clavos
- Zumo de 2 naranjas
Eliminar el pedúnculo, cortar las ciruelas por la mitad, quitar el hueso y cortar en trozos. No pelarlas ya que la piel dará a la mermelada un color muy bonito.
Envolver por un lado la canela y por el otro los clavos en una gasa, como si hiciéramos un bouquet garní. De esta manera los podremos eliminar sin problemas antes de triturar.
En una olla de fondo grueso poner las ciruelas, el azúcar, el zumo de naranja y los paquetitos de canela y clavos. A mí me gusta la mermelada un poco ácida. Si os gusta más dulce añadirle un poco más de azúcar.
Poner el fuego fuerte y en cuanto comience a hervir bajar al mínimo.
Dejar hirviendo durante aproximadamente una hora. Mover a menudo.
Sacar la canela y clavos y pasar por el pasapurés, con agujeros grandes para que se noten ligeramente los trocitos de ciruela.
Un truco para saber que la consistencia de la mermelada es la correcta es poner en un poco en un plato frío, que previamente hemos metido en la nevera, y hacer un surco con una cuchara. Si la mermelada no vuelve al sitio, la consistencia es correcta. Si vuelve al sitio es que esta demasiado líquida y la tendremos que poner al fuego un rato más.
Si queremos que nos aguante durante todo el año, envasarla al vacío.
Utilizar botes esterilizados, rellenarlos con la mermelada caliente, un dedo por debajo del borde, cerrar y dejar enfriar boca abajo.
Os podéis hacer unas ricas tostadas para desayunar con o sin mantequilla o tomarla con quesos y patés. También es un buenísimo acompañamiento para carnes blancas, aves y caza.
Cocinando con Marieta 
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